Crecen los pies desde las manos cartílagos de brumas y un paisaje dislocado. Deseo en búsqueda de un nombre... Fecunda óvulos de una mariposa ciega. Tantas puertas detrás del arcoiris, abiertas , violan el pudor de casas desiertas. Sin reclamos ni piedades Las invade Se acerca y la siguen... Ebria vive... Ajena, siempre detrás del arcoiris.
Pinturas: Antoine Josse, artista contemporáneo. Música Erik Satie
y en pantanos sensitivos, brusca caída en el olvido.
Desiertos,en el jardín de los árboles muertos.
Loca de ausencia huyo...
Un cul de sac en la ciudad
Intento equilibrios, divago.
Arranco la lengua convulsiva que no silencia el grito.
Un sol cuadrado y roto
Recojo miserias de anodinos versos Deambulo perdida entre trenes y andenes
Enervada de poesía reseca en esta cárcel de hechizos, presa loca de ausencia,inútil, cautiva, sigo....
Loca de ausencia, loca de ti, endemoniada,
en una celda fucsia, sin lunas ni albas
Los engaño y río furtiva
Soy tantas, soy mil
y ahora otra
que canta y danza con una máscara blanca
Hondas sacudidas y vértigos divinos
recitando versos demasiado intensos para escribirlos
Sintiendo el suceso, la delicia, la sensualidad y el éxtasis
Savia vegetal, sangre animal y fluído de cielo.
Inútil las rejas, no existe el encierro.
Percepciones que producen estupor... En la calle; lenguajes entreverados de paseantes anodinos. Un cielo violeta y mudo... Esa foto mustia. La sinfonía desencadenada que sugiere un relato... El roce casual con la áspera hoja del malvón... Placeres inmediatos,violentos, estallan sin mediaciones... En ese tramo fugaz accedo a una voluptuosa mismidad. Surge el grito del goce: ¡Aquí estoy! Pura atopía... ¿Qué hago con mi presencia plena que expira, ya...? Se transforma en palabras o sobre un lienzo se deshace en color...